No. En este nuevo post no vamos a analizar el genial sketch de los Monty Python. Aunque, precisamente, fue en este gag donde tuvo origen este término.

Como la mayoría de usuarios de Internet conocerán, por SPAM se conoce a los mensajes no deseados que suelen propagarse por correos electrónicos o blogs, generalmente de tipo publicitario y en grandes cantidades, enviados por remitentes no autorizados por el receptor.

De hecho, todas las personas que usan con asiduidad el correo electrónico o gestionen un blog o una página web en los que los comentarios se encuentren habilitados han sufrido, en menor o mayor medida, este envío masivo de mensajes.

Como todo en esta vida, y más si nos referimos al ámbito de las nuevas tecnologías, estos mensajes de SPAM han evolucionado. Los llamados bots encargados de enviarlos se han hecho más fuertes, más inteligentes. De hecho, es impresionante cómo los comentarios han pasado de los típicos anuncios destinados a ofrecer pequeñas ayudas para potenciar la virilidad masculina o vender lujosos relojes a precios de ganga –al estilo Trolex-, a párrafos muy logrados que dan la sensación de haber sido escritos por humanos.

A continuación, vamos a mostraros algunos de ejemplos de este tipo de SPAM que, a priori, pueden pasar desapercibidos, pertenecientes al blog de una empresa de rehabilitación de viviendas y edificios que gestionamos en Seis60. (Para verlos mejor, haz click en cada una de las imágenes).

Foto 1

Un comentario sobre lo bien que lo ha hecho Blackberry para hacer funcionar una app en su sistema operativo, publicado en un post sobre aplicaciones que todo arquitecto debería tener en su móvil. Aunque se haya publicado automáticamente siguiendo patrones de palabras claves, no tiene nada que ver con lo que se comenta en el post. Eso sí, por lo menos, este bot es sincero y en la parte final reconoce que no nos dejemos engañar, que su interfaz gráfica no es para tanto.

Foto 2

Nos encontramos un mensaje bastante halagador. Podría ser cierto, que sea una persona que reconozca que este blog le ha encantado. En ese caso, nos sentiríamos muy realizados. Lástima que, después de fijarnos en la lista de moderación, este ‘usuario’ haya escrito 7 veces el mismo mensaje en otras tantas entradas…

Foto 3

En ocasiones, otros comentarios llegan en un perfecto inglés, situación que deberíamos eliminar ipso facto. Sobre todo si lo que nos cuenta el hipotético seguidor que lo prioritario para él es el desayuno… ¡SPAM!

Foto 4

Otro ejemplo de mensaje adaptado al post nos lo trae el gran Charles Jones, que nos ofrece su particular idea de cómo ahorrar en la factura eléctrica.

Foto 5

Y en este último ejemplo, nos topamos con un comentario que bien podría haber sido sacado de un manual de instrucciones para evitar que el agua de la piscina se congele en invierno. Mención especial al número de consejo (debe de haber visitado 8 blogs anteriores escribiendo otras tantas recomendaciones).

Aunque la opción más sensata -y de obligado cumplimiento- para estos casos es deshabilitar la publicación automática de los comentarios, si no se toman medidas necesarias, todos estos mensajes irán formando parte de una amplia cola de comentarios esperando su moderación, lo que puede convertirse en una tarea tediosa. Para ello, existen una serie de acciones, plugins y herramientas que pueden ayudar a identificar estos mensajes no deseables y eliminarlos automáticamente. Os dejamos algunos de ellos:  Language based anti-spam, Anti-spam, Spam destroyer, o Spam-free WordPress.

¿Y vosotros, qué métodos utilizáis para rechazar estos mensajes no deseados?

Daniel Barberá López

@Dani_Barbera

Consultor de comunicación en Seis60