Dicen que el que no corre, vuela, pero en la actualidad no es solo que haya que correr para no quedarse atrás si no que si no vuelas, te detienes y si te detienes, desapareces. Y es que si quieres destacar, seguir adelante y avanzar al menos a la vez que lo hace tu competencia, no te queda otra que intentar salirte del plato y marcar la diferencia, utilizando la imaginación.

Ya estamos cansados de escuchar que no es posible realizar una campaña de marketing o comunicación por falta de presupuesto, que para llamar la atención hay que realizar una gran inversión. Estamos hartos de demostrar que para destacar solo es necesario invertir tiempo en pensar.

Resulta curioso que en el II Encuentro de Innovación y Creatividad de la Diputación de Sevilla, sólo nos hayamos encontrado con bonitos stands de colores con el logotipo impreso de cada empresa. Te ofrecen la oportunidad de asistir, además de un stand, una pantalla de televisión, un cubo para presentaciones, una sala para formación y ¿qué hacemos con todo esto? Repartir tarjetas.

Así, una feria que debería haber roto los esquemas de muchos y atraer la atención de aún más personas, se ha convertido, dentro de la actualidad informativa local, en una actividad más entre tantas que se organizan en la ciudad. Con un grupo de empresas más, de entre tantas que existen en la provincia. Y no es por falta de empresas innovadoras que un “encuentro de innovación y creatividad” se convierta en una mera exposición aburrida de stands, sino por falta de imaginación o, más bien, por falta de dedicación y esfuerzo dedicado a pensar y, en definitiva, a crear y destacar.

Repartir naranjas con una cesta y un delantal seguramente no marcará un antes y un después dentro de las tendencias del marketing. Incluir en las naranjas el mensaje “¿Quieres sacarle todo su jugo? Acércate al stand de Seis60” quizás no suponga una acción rompedora. Impartir pequeños talleres formativos en el stand seguro que no es una idea pionera. Pero estas pequeñas iniciativas son fruto de nuestra imaginación y de nuestras ganas de pintar el mundo de naranja. Si nosotros podemos poner un punto naranja entre 20 grises con una caja de fruta, ¿por qué no puede hacerlo cualquiera? Al fin y al cabo, y haciendo referencia a otro conocido refrán, querer es poder… ¡y poder es ser! 

Alicia Casado