La explosión de medios sociales en Internet ha traído consigo una consecuente demanda en lo que se denomina como una de las nuevas profesiones de la actualidad: la figura del Community Manager (o Responsable de Comunidad, por romper una lanza a favor de nuestro idioma y no escribir siempre en inglés este tipo de términos).
Para muchos, el Community Manager o CM viene a ser la evolución del jefe de prensa o, incluso, la sustitución del Dircom. Es decir que, por esa regla de tres, las redes sociales serían la sustitución de la prensa y de la Comunicación en general. Por lo que, llegados a esta conclusión, remataríamos con una afirmación tajante: las redes sociales han sustituido a los periódicos impresos y digitales, a la radio, a la televisión y, por ende, invaden el 100% de los planes de comunicación de las empresas e instituciones. Desde las Relaciones Públicas de la empresa hasta sus compromisos institucionales, pasando por las ruedas de prensa y todo tipo de eventos de promoción. Todo lo copan las redes sociales.
Es más, la cada vez más creciente solicitud de puestos de trabajo y cargos de este estilo ha provocado que el intrusismo que desde siempre hemos soportado en esta profesión incremente, por si fuera poco, aún más. Y es que ya no hay que ser ni periodista, ni licenciado en comunicación, ni tan siquiera haber estudiado una carrera. Ahora todo hijo de vecino, sea cual fuere su profesión, experiencia o estudios, puede ejecutar y gestionar las redes sociales de una compañía. Tan sólo por el hecho de conocer cómo se manejan (y en algunos casos ni eso).
Esto ha repercutido en ejemplos de redes sociales que son gestionadas por personas sin ningún tipo de sensibilidad en el campo de la Comunicación. Son muchos los casos, que no voy a citar, donde se pueden leer desde errores ortográficos hasta mensajes que no siguen ningún tipo de estrategia, que no dicen absolutamente nada, del estilo de ‘la empresa X a asistido’, ‘Seguirnos en nuestro facebook‘ o ‘Nos complace tenerte como amigo!!’ (ejemplos reales). Es decir, casos que, lejos de enriquecer la imagen corporativa de la empresa, la ensucian hasta límites insospechados. Todo vale con tal de decir algo en las redes sociales. Con dejar impregnada tu huella.
Pero esto no es así. Ni el Community Manager ha sustituido al Dircom (es como decir que la pata sustituye a la mesa), ni las empresas que apuestan por un Community Manager sin ninguna estrategia van a ganar en reputación online. Desde seis60 defendemos el uso inteligente de las redes sociales, que se planifiquen siguiendo una estrategia (para eso están los planes de comunicación) y que los gestione una persona, de forma profesional, con estudios y experiencia en el ámbito de la Comunicación. En caso contrario, para comunicar nada o mal, es preferible no hacerlo.
Estamos hablando de algo muy serio. De la imagen de tu empresa, de su reputación. De lo que millones de personas van a conocer sobre tu negocio. Si te duele la barriga, ¿irías a la consulta de un médico o de un arquitecto? A veces el sentido común es el menos común de los sentidos.